Hoy en día, muchas madres están en el mercado laboral por una multitud de razones. Para algunos, una carrera puede ser una elección, mientras que para otros, un trabajo es obligatorio para la supervivencia fiscal. Pero estas madres tienen una cosa importante en común: encontrar un equilibrio entre trabajo y vida.

Ordena tus prioridades y aprende el arte de la delegación

Si quieres ser una mujer trabajadora de éxito, es importante definir tus prioridades - personales y profesionales. Para determinar sus responsabilidades a diferentes niveles, hágase algunas preguntas. ¿Qué no puede ser comprometido o es completamente no negociable? ¿Qué tareas debería disfrutar y cuáles pueden ser suficientes? ¿Cuáles son los compromisos más importantes en el trabajo y en la familia? Una buena crianza comienza con el establecimiento de prioridades, haciendo ajustes y decidiendo qué es y qué no está preparado para hacer. No hay nada malo en reconocer que no puedes hacerlo todo tú mismo, y una pequeña ayuda podría aliviar tu enorme carga de trabajo. Haciendo todo por ti mismo, no sólo estás cansando tu cuerpo, sino que también lo estás preparando para un posible colapso. Decide lo que necesitas hacer tú mismo y lo que otros pueden hacer. Pida ayuda a sus colegas, a su cónyuge y a sus familiares. Usted y su cónyuge pueden dividir las tareas para que ambos no tengan miedo de volver a casa después de un largo día de trabajo.

Mantente conectado durante el día y limita las distracciones

Gracias a la tecnología, conocer el bienestar de tus seres queridos y saber dónde están ya no es un desafío. Todas las madres trabajadoras pueden mantenerse en contacto con sus hijos mientras trabajan en la oficina. Si extrañas a tus hijos, puedes hacer una llamada telefónica o incluso una videollamada durante tu hora de almuerzo y concentrarte en tu trabajo, sin estrés o tensión en el servidor. Esto le da al niño el consuelo y la seguridad de que usted está cerca de ellos. También te ayuda a superar un día difícil en el trabajo. Cuando estás en el trabajo, cada minuto es crucial, tanto en el trabajo como en casa. Te sorprendería saber que las distracciones en el lugar de trabajo pueden costarte más de tres horas al día. Si quieres ser centrado y productivo, es esencial mantener a raya a los compañeros de trabajo habladores, a los navegantes ocasionales de Internet, a los teléfonos inteligentes y a otras distracciones. Establezca plazos específicos para la dirección de correo electrónico y el uso del teléfono. En casa, evita ver demasiada televisión. En su lugar, utilice este tiempo para fortalecer la relación con su pareja e hijos. Esto ya es una buena base para una buena crianza.

Dibuja una línea entre el hogar y el trabajo

Una de las mayores lecciones que la vida ha enseñado a mucha gente es decir "no" a las cosas que no encajan en sus prioridades. Lo creas o no, es muy importante saber cómo hacer malabares con tu vida personal y profesional. Aprende a poner límites, para que puedas dar tu corazón y tu alma a ambos aspectos de la vida. Saber cómo dejar el trabajo en el trabajo. Por ejemplo, cuando pase tiempo con sus hijos y su pareja, no llame para enviar correos electrónicos o discutir el trabajo con sus compañeros de trabajo. Sé consciente de tus relaciones personales y empieza a decir "no" a las cosas que no se sienten bien. Teniendo en cuenta todos estos puntos, podrás combinar la maternidad y la vida laboral con bastante facilidad, y empezar a tener una buena organización de la crianza de los hijos.